El biker andaluz David Valero, actual campeón nacional de bicicleta de montaña, obtuvo la primera medalla del deporte andaluz en estos Juegos Olímpicos, la de bronce, al llegar en tercera posición en la prueba de campo a través (cross-country), a 34 segundos del campeón, el polifacético británico Tom Pidcock.
En una prueba cuya atención mediática la compartieron la estrella de carretera y ciclocross, el neerlandés Mathieu Van der Poel (finalmente retirado), y el propio Pidcock, el bastetano fue fiel a su clásica y menos vistosa táctica de carrera de ir de menos a más. Si, en la primera de las siete vueltas al precioso circuito de Izu, Valero pasó por meta en el puesto 22.º, a 31″ de la cabeza, en los siguientes giros su remontada fue cada vez más consistente, superando a rivales más explosivos pero menos fondistas.
Así, el andaluz, antiguo becado de la Fundación Andalucía Olímpica, pasó 17.º en la vuelta 2, 12.º en la vuelta 3 y 8.º en las vueltas 4 y 5, antes de dar el definitivo «zarpazo» en el sexto giro, cuando alcanzó el grupo del campeón olímpico de 2016, Nino Schurter, donde también marchaban el neozelandés Cooper y el francés Koretzky, y pasar en puesto de medalla, tercero, por meta.
La última vuelta fue un mano entre Schurter y Valero, quien finalmente atacó al helvético y le endosó ocho segundos para alzarse, al término de los 28,25 kilómetros de recorrido, con la vigésima novena medalla olímpica de la historia del deporte andaluz.